Textiles reconocen una «retracción del 30%»

Fuente: El Marplatense – Lo aseguró Guillermo Fasano, titular de la Cámara Textil de Mar del Plata. “Para nosotros la reforma de la Ley de Contrato de Trabajo es fundamental», sostuvo el empresario.

Los textiles vienen sufriendo las consecuencias del ajuste, los aumentos en los servicios y la caída en las ventas. Y lo han puesto en conocimiento de la opinión pública. “El mercado se ha retraído en un 30%«, afirmó el presidente de la Cámara Textil de Mar del Plata, Guillermo Fasano.Ads

“Lo que hemos sacado como conclusión de todo este proceso de ajuste que hubo en la macroeconomía es que ha impactado en el nivel de actividad, consumo y producción en un 30% menos”, dijo el empresario. 

Para Fasano, «esa baja lleva implícito una reducción en la planta de personal y de estructura”, advirtió y comentó que “las perspectivas no dependen de nuestra voluntad, sino de las políticas micro que no se vislumbran en el corto plazo”.

Luego, el titular los textiles señalo que “para nosotros la reforma de la Ley de Contrato de Trabajo es fundamental, nuestro planteo es sin afectar en lo más mínimo los derechos de los trabajadores» y piden “buscar el sistema para que se demuela la industria del juicio laboral, que a las PyMEs les significa por empleados que hemos tenido por dos o tres años demandas gigantescas con honorarios increíbles que terminan en cualquier precio”.

Y ejemplificó: «Tenemos socios que han abierto un local en determinado lugar por tres años y cuando terminan la actividad porque no les conviene o por lo que fuere y tienen que despedir a un empleado, por tres años les piden 40 o 50 millones de pesos de indemnización y es un delirio, una locura”.Ads

Fasano consideró que “sin reforma laboral – más que nada en lo que se refiere a la industria del juicio laboral- no hay nuevos empleos. Hace catorce años que pasa eso y va a seguir pasando y no va a haber inversiones. La economía se reactiva con nuevos empleos y con inversiones; no va a haber reactivación si no hay inversiones ya sea porque la gente no quiere arriesgar sus ahorros en un emprendimiento o porque se lo puede llevar un juicio laboral”.

Los impuestos representan más de la mitad del precio al público de la ropa

Fuente: infobae – La industria textil enfrenta serias dificultades por el aumento de costos, más cargas tributarias en los tres niveles de gobierno y caída de ventas. Qué medidas pide el sector

Laindustria textil e indumentaria atraviesa una situación compleja en medio del aumento de costos de producción y tributarios y la apertura de importaciones.

A su vez, la caída del poder adquisitivo de la población hace que cada vez sea más difícil para los consumidores acceder a las prendas de vestir, a pesar de que el rubro se incrementó por debajo de la inflación.

Según datos de la Fundación ProTejer para Infobae, en Argentina existe una amplitud de precios enorme: prendas similares pueden valer hasta 13 veces más dependiendo del canal de comercialización. Los costos de alquiler, logísticos, de intermediarios, gastos de publicidad y marketing y tributarios, explican, hacen la diferencia.

“Si analizamos el precio de la ropa que se vende en un shopping, a pesar de la idea generalizada de que son los empresarios industriales los culpables del precio de la ropa, la industria textil e indumentaria, incluida su rentabilidad, sólo representa un 8,5% del precio final”, aseguraron desde ProTejer.

El costo de la industria textil e indumentaria, incluida su rentabilidad, sólo representa 8,5% del precio final al público (ProTejer)

En tanto, los costos y rentabilidad de las marcas que desarrollan los diseños, el marketing y la publicidad, y los costos de logística y comercialización, representan 24,8% del precio facturado.

Fuera de la cadena de valor, hay otros costos que componen el precio de la indumentaria y que representan un porcentaje superior al que remunera a toda la actividad industrial.

Composición del precio de la ropa (ProTejer)Composición del precio de la ropa (ProTejer)

La financiación de una tarjeta de crédito representa un costo que alcanza según ProTejer 12,2% del precio de venta de la ropa, mientras que el alquiler del local donde se comercializa el producto, explica otro 12,7%. A esto se le suman los principales impuestos nacionales, provinciales y municipales que representan 50,3% del precio de venta.

Es decir, el 75,2% del precio que abona el consumidor final por una remera, por ejemplo, en un shopping, se utiliza para el pago de impuestos, servicios financieros y alquileres.

El 75,2% del precio que abona el consumidor final por una remera en un shopping, se utiliza para el pago de impuestos, servicios financieros y alquileres (ProTejer)

Particularmente en el caso de los impuestos, el gobierno de Javier Milei no los redujo y flexibilizó las importaciones para promover la competencia, generando inquietud en la industria.

En este sentido, se eliminó la obligatoriedad de que muchos productos textiles o calzado y productos con medidas antidumping deban ingresar al país obligatoriamente por el canal rojo de la Aduana. Esto significa que dejará de exigirse la verificación física además de la documental.

Valores relativos

Por otro lado, el precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses por los aumentos de tarifas, transporte y alimentos, con salarios y jubilaciones que comenzaron el año perdiendo contra la inflación.

De hecho, con datos a febrero, la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) anotó una caída cuatrimestral del 24%, siendo la mayor desde que se elabora el índice, según estimaciones de Salvador Vitelli.

El precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses (Bloomberg)El precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses (Bloomberg)

Respecto a la inflación, Indumentaria no fue el rubro que más se incrementó en marzo, se ubicó incluso levemente por debajo del nivel general: las subas fueron del 10,9% y 11%, respectivamente.

“La ropa no sólo registra los menores aumentos en los últimos meses, sino que, considerando un período de tiempo más largo, 7 de los 12 rubros del Indice de Precios al Consumidor (IPC) se incrementaron más: alimentos y bebidas, equipamiento y mantenimiento de hogar, salud, transporte, recreación y cultura, restaurantes y hoteles y bienes y servicios varios. Incluso muchas de estas categorías incluyen -además de bienes- servicios con precios regulados (o subsidiados) que llevan el promedio hacia abajo”, precisaron desde ProTejer.

De acuerdo a estimaciones de la entidad, la inflación fue del 4.726% entre diciembre de 2016 y febrero de 2024, mientras que los precios de las prendas de vestir se incrementaron un 4.436% (290 puntos porcentuales por debajo del nivel general). “Esta realidad muchas veces queda invisibilizada”, afirmaron.

La inflación fue del 4.726% entre diciembre 2016 y febrero 2024, mientras que los precios de las prendas de vestir se incrementaron un 4.436% (ProTejer)

En la misma línea, en la Ciudad de Buenos Aires, según la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), entre diciembre de 2022 y marzo de 2024, el nivel general de precios acumuló una suba de 369%, mientras que la indumentaria subió 249%. Eso representó un abaratamiento relativo de 26 por ciento.

A marzo, los precios de la ropa llevan 14 meses consecutivos por debajo del nivel general de la inflación (CIAI)A marzo, los precios de la ropa llevan 14 meses consecutivos por debajo del nivel general de la inflación (CIAI)

“Esto se produce por dos fenómenos combinados: los faltante de insumos y la falta de capacidad productiva para abastecer el mercado interno produjo una presión fuerte sobre los precios durante el período post pandémico pero con las inversiones que se hicieron, a través de las ampliaciones productivas, se equilibraron en 2023 e incluso después tendieron a bajar incluso por debajo de la inflación debido a una etapa de menores ventas”, dijo a Infobae Claudio Drescher, presidente de CIAI.

Comparación con el resto del mundo

En cuanto a la comparación con los precios internacionales, fuentes del sector consideraron: “Muchas veces se compara incorrectamente los precios de la ropa en Argentina con los del resto del mundo. Se comparan marcas muy distintas -no es lo mismo GAP, H&M, Zara o Louis Vuitton- o productos de nueva colección con temporadas anteriores”.

Muchas veces se compara incorrectamente los precios de la ropa en Argentina con la de otros países en marcas y prendas de diferente estación

“Tampoco se incluyen los costos de financiación en los precios internacionales o los impuestos al consumidor (Argentina los incluye en el precio de venta online mientras EE.UU, en general, no). Otra cuestión es que no se considera la distorsión que genera el costo logístico de transportar un producto a miles de kilómetros, en relación con el peso que tiene en otros países”, agregaron.

Además, “suelen comparan precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen”, explicaron.

"Suelen comparar precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen", dijo la fuente (Reuters)«Suelen comparar precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen», dijo la fuente (Reuters)

Desde Fundación ProTejer indican que si se comparan marcas similares nacionales e internacionales, los precios en Argentina son más bajos. Y ejemplificaron: “Vemos corpiños de Caro Cuore o Selú (lencería de marca premium y calidad argentina) en promedio a $35.000 y bombachas con precios de entre $15.000 y $20.000 con impuestos. De esta manera, el conjunto queda en alrededor de USD 45 al tipo de cambio turista ($1.414 para la venta). El conjunto de ropa interior clásico de Victoria´s Secret supera los 60 dólares″.

Ahora bien, comparando la misma marca internacional en Argentina y en otros países, los precios son similares e incluso a veces más caros. Por ejemplo, un buzo clásico Adidas tiene un precio de USD 60 ($83.000), mientras que en el portal online de EEUU tiene un valor de USD 79. Similarmente, un jean Levis 501 vendido en el portal web de Italia cuesta USD 140. En Argentina tiene un valor de USD 120 ($168.000), detallaron en la entidad.

Necesidades para reactivar el sector

En la actualidad, “a partir de la devaluación de diciembre, se han paralizado varias industrias muy importantes del consumo interno, con una caída absolutamente abrupta e inédita de ventas, porque ha habido procesos recesivos mayores pero no con la velocidad y la contundencia que se dio en esta oportunidad. En el sector de indumentaria y confección hay una gran preocupación ya que vemos una caída que está en torno al 35-40%”, expresó Drescher.

En el sector de indumentaria y confección hay una gran preocupación ya que vemos una caída que está en torno al 35-40% (Drescher)

Y agregó: “Nos preocupa las suspensiones y despidos que empezaron en el sector, y que muchas pymes están en situación de haber invertido su capital de trabajo en el desarrollo de las prendas para la temporada de invierno, quedando con remanentes que no van a ser vendidos. Esto va a afectar su estabilidad financiera”.

En este contexto, desde ProTejer mencionaron, entre otros, algunos ejes de políticas públicas sobre los cuales necesitan avanzar para atravesar la coyuntura y potenciar la producción y el empleo de la cadena de valor:

  • Extensión de la cantidad de cuotas disponibles para el pago de impuestos para pymes;
  • Suspensión de los regímenes de Retención y Percepción de IVA y a las Ganancias;
  • Moratoria fiscal y previsional;
  • Programa para el sostenimiento de la producción para empresas y trabajadores (Repro);
  • Financiamiento con apoyo estatal accesible y favorable para capital de trabajo;
  • Programa de fomento a las exportaciones con valor agregado industrial, diseño y marca argentina, que incluya misiones al exterior, financiamiento, marca país y subsidios o reintegros al sobrecosto argentino. Aumento de reintegros a las exportaciones industriales;
  • Programa de financiamiento al consumo de productos textiles nacionales (hoy Cuota Simple);
  • Restitución del Sistema de Capacidad Económica Financiera (CEF) o mecanismo similar para regular nuevos importadores;
  • Refuerzo de controles aduaneros para evitar maniobras elusivas y contrabando;
  • Aumento del Impuesto PAIS para importaciones de bienes finales textiles. Progresividad en función del agregado de valor;
  • Rápida liberación del sistema de pago de importación de insumos sin fabricación nacional o eliminación de incompatibilidad de CCL y Mercado Único y Libre de Cambios;
  • Renovación Programa de reducción de aportes patronales para reducir la informalidad en la confección;
  • Plan de promoción de inversiones productivas (financiamiento y beneficios tributarios)

Los impuestos representan más de la mitad del precio al público de la ropa

Fuente: infobae – La industria textil enfrenta serias dificultades por el aumento de costos, más cargas tributarias en los tres niveles de gobierno y caída de ventas. Qué medidas pide el sector

Laindustria textil e indumentaria atraviesa una situación compleja en medio del aumento de costos de producción y tributarios y la apertura de importaciones.

A su vez, la caída del poder adquisitivo de la población hace que cada vez sea más difícil para los consumidores acceder a las prendas de vestir, a pesar de que el rubro se incrementó por debajo de la inflación.

Según datos de la Fundación ProTejer para Infobae, en Argentina existe una amplitud de precios enorme: prendas similares pueden valer hasta 13 veces más dependiendo del canal de comercialización. Los costos de alquiler, logísticos, de intermediarios, gastos de publicidad y marketing y tributarios, explican, hacen la diferencia.

“Si analizamos el precio de la ropa que se vende en un shopping, a pesar de la idea generalizada de que son los empresarios industriales los culpables del precio de la ropa, la industria textil e indumentaria, incluida su rentabilidad, sólo representa un 8,5% del precio final”, aseguraron desde ProTejer.

El costo de la industria textil e indumentaria, incluida su rentabilidad, sólo representa 8,5% del precio final al público (ProTejer)

En tanto, los costos y rentabilidad de las marcas que desarrollan los diseños, el marketing y la publicidad, y los costos de logística y comercialización, representan 24,8% del precio facturado.

Fuera de la cadena de valor, hay otros costos que componen el precio de la indumentaria y que representan un porcentaje superior al que remunera a toda la actividad industrial.

Composición del precio de la ropa (ProTejer)Composición del precio de la ropa (ProTejer)

La financiación de una tarjeta de crédito representa un costo que alcanza según ProTejer 12,2% del precio de venta de la ropa, mientras que el alquiler del local donde se comercializa el producto, explica otro 12,7%. A esto se le suman los principales impuestos nacionales, provinciales y municipales que representan 50,3% del precio de venta.

Es decir, el 75,2% del precio que abona el consumidor final por una remera, por ejemplo, en un shopping, se utiliza para el pago de impuestos, servicios financieros y alquileres.

El 75,2% del precio que abona el consumidor final por una remera en un shopping, se utiliza para el pago de impuestos, servicios financieros y alquileres (ProTejer)

Particularmente en el caso de los impuestos, el gobierno de Javier Milei no los redujo y flexibilizó las importaciones para promover la competencia, generando inquietud en la industria.

En este sentido, se eliminó la obligatoriedad de que muchos productos textiles o calzado y productos con medidas antidumping deban ingresar al país obligatoriamente por el canal rojo de la Aduana. Esto significa que dejará de exigirse la verificación física además de la documental.

Valores relativos

Por otro lado, el precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses por los aumentos de tarifas, transporte y alimentos, con salarios y jubilaciones que comenzaron el año perdiendo contra la inflación.

De hecho, con datos a febrero, la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) anotó una caída cuatrimestral del 24%, siendo la mayor desde que se elabora el índice, según estimaciones de Salvador Vitelli.

El precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses (Bloomberg)El precio de la ropa en Argentina es alto si se compara con el poder adquisitivo, el cual se vio fuertemente afectado en los últimos meses (Bloomberg)

Respecto a la inflación, Indumentaria no fue el rubro que más se incrementó en marzo, se ubicó incluso levemente por debajo del nivel general: las subas fueron del 10,9% y 11%, respectivamente.

“La ropa no sólo registra los menores aumentos en los últimos meses, sino que, considerando un período de tiempo más largo, 7 de los 12 rubros del Indice de Precios al Consumidor (IPC) se incrementaron más: alimentos y bebidas, equipamiento y mantenimiento de hogar, salud, transporte, recreación y cultura, restaurantes y hoteles y bienes y servicios varios. Incluso muchas de estas categorías incluyen -además de bienes- servicios con precios regulados (o subsidiados) que llevan el promedio hacia abajo”, precisaron desde ProTejer.

De acuerdo a estimaciones de la entidad, la inflación fue del 4.726% entre diciembre de 2016 y febrero de 2024, mientras que los precios de las prendas de vestir se incrementaron un 4.436% (290 puntos porcentuales por debajo del nivel general). “Esta realidad muchas veces queda invisibilizada”, afirmaron.

La inflación fue del 4.726% entre diciembre 2016 y febrero 2024, mientras que los precios de las prendas de vestir se incrementaron un 4.436% (ProTejer)

En la misma línea, en la Ciudad de Buenos Aires, según la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), entre diciembre de 2022 y marzo de 2024, el nivel general de precios acumuló una suba de 369%, mientras que la indumentaria subió 249%. Eso representó un abaratamiento relativo de 26 por ciento.

A marzo, los precios de la ropa llevan 14 meses consecutivos por debajo del nivel general de la inflación (CIAI)A marzo, los precios de la ropa llevan 14 meses consecutivos por debajo del nivel general de la inflación (CIAI)

“Esto se produce por dos fenómenos combinados: los faltante de insumos y la falta de capacidad productiva para abastecer el mercado interno produjo una presión fuerte sobre los precios durante el período post pandémico pero con las inversiones que se hicieron, a través de las ampliaciones productivas, se equilibraron en 2023 e incluso después tendieron a bajar incluso por debajo de la inflación debido a una etapa de menores ventas”, dijo a Infobae Claudio Drescher, presidente de CIAI.

Comparación con el resto del mundo

En cuanto a la comparación con los precios internacionales, fuentes del sector consideraron: “Muchas veces se compara incorrectamente los precios de la ropa en Argentina con los del resto del mundo. Se comparan marcas muy distintas -no es lo mismo GAP, H&M, Zara o Louis Vuitton- o productos de nueva colección con temporadas anteriores”.

Muchas veces se compara incorrectamente los precios de la ropa en Argentina con la de otros países en marcas y prendas de diferente estación

“Tampoco se incluyen los costos de financiación en los precios internacionales o los impuestos al consumidor (Argentina los incluye en el precio de venta online mientras EE.UU, en general, no). Otra cuestión es que no se considera la distorsión que genera el costo logístico de transportar un producto a miles de kilómetros, en relación con el peso que tiene en otros países”, agregaron.

Además, “suelen comparan precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen”, explicaron.

"Suelen comparar precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen", dijo la fuente (Reuters)«Suelen comparar precios a dólar oficial cuando tanto una compra en el exterior con tarjeta como una importación no se realizan a ese tipo de cambio sino que pagan otros impuestos (PAIS) que la encarecen», dijo la fuente (Reuters)

Desde Fundación ProTejer indican que si se comparan marcas similares nacionales e internacionales, los precios en Argentina son más bajos. Y ejemplificaron: “Vemos corpiños de Caro Cuore o Selú (lencería de marca premium y calidad argentina) en promedio a $35.000 y bombachas con precios de entre $15.000 y $20.000 con impuestos. De esta manera, el conjunto queda en alrededor de USD 45 al tipo de cambio turista ($1.414 para la venta). El conjunto de ropa interior clásico de Victoria´s Secret supera los 60 dólares″.

Ahora bien, comparando la misma marca internacional en Argentina y en otros países, los precios son similares e incluso a veces más caros. Por ejemplo, un buzo clásico Adidas tiene un precio de USD 60 ($83.000), mientras que en el portal online de EEUU tiene un valor de USD 79. Similarmente, un jean Levis 501 vendido en el portal web de Italia cuesta USD 140. En Argentina tiene un valor de USD 120 ($168.000), detallaron en la entidad.

Necesidades para reactivar el sector

En la actualidad, “a partir de la devaluación de diciembre, se han paralizado varias industrias muy importantes del consumo interno, con una caída absolutamente abrupta e inédita de ventas, porque ha habido procesos recesivos mayores pero no con la velocidad y la contundencia que se dio en esta oportunidad. En el sector de indumentaria y confección hay una gran preocupación ya que vemos una caída que está en torno al 35-40%”, expresó Drescher.

En el sector de indumentaria y confección hay una gran preocupación ya que vemos una caída que está en torno al 35-40% (Drescher)

Y agregó: “Nos preocupa las suspensiones y despidos que empezaron en el sector, y que muchas pymes están en situación de haber invertido su capital de trabajo en el desarrollo de las prendas para la temporada de invierno, quedando con remanentes que no van a ser vendidos. Esto va a afectar su estabilidad financiera”.

En este contexto, desde ProTejer mencionaron, entre otros, algunos ejes de políticas públicas sobre los cuales necesitan avanzar para atravesar la coyuntura y potenciar la producción y el empleo de la cadena de valor:

  • Extensión de la cantidad de cuotas disponibles para el pago de impuestos para pymes;
  • Suspensión de los regímenes de Retención y Percepción de IVA y a las Ganancias;
  • Moratoria fiscal y previsional;
  • Programa para el sostenimiento de la producción para empresas y trabajadores (Repro);
  • Financiamiento con apoyo estatal accesible y favorable para capital de trabajo;
  • Programa de fomento a las exportaciones con valor agregado industrial, diseño y marca argentina, que incluya misiones al exterior, financiamiento, marca país y subsidios o reintegros al sobrecosto argentino. Aumento de reintegros a las exportaciones industriales;
  • Programa de financiamiento al consumo de productos textiles nacionales (hoy Cuota Simple);
  • Restitución del Sistema de Capacidad Económica Financiera (CEF) o mecanismo similar para regular nuevos importadores;
  • Refuerzo de controles aduaneros para evitar maniobras elusivas y contrabando;
  • Aumento del Impuesto PAIS para importaciones de bienes finales textiles. Progresividad en función del agregado de valor;
  • Rápida liberación del sistema de pago de importación de insumos sin fabricación nacional o eliminación de incompatibilidad de CCL y Mercado Único y Libre de Cambios;
  • Renovación Programa de reducción de aportes patronales para reducir la informalidad en la confección;
  • Plan de promoción de inversiones productivas (financiamiento y beneficios tributarios)

Preocupa a textiles la eliminación de controles aduaneros a las importaciones

Fuente: ámbito – La Fundación Pro Tejer alertó que la decisión de dejar de aplicar el canal rojo aduanero traerá perjuicio a la industria local.

La Fundación Pro Tejer alertó que la decisión del Gobierno de eliminar el canal rojo de la Aduana para el control de la importación de productos textiles o de calzado y de productos con medidas antidumping, lejos de hacer más eficiente el comercio exterior genera una “competencia desleal” con los productores nacionales.

Mediante un fuerte comunicado, la entidad que nuclea a productores textiles de todo el país sostuvo que “para eficientizar el comercio exterior no se deben eliminar controles, sino optimizarlos y mejorarlos con el fin de que sirvan para una inserción internacional más estratégica”.

“Eficientizar una herramienta no se resuelve eliminándola, sino mejorándola. El control físico de la mercadería en canal rojo de comercialización es complementario al resto de las medidas como antidumping o valores criterios, y necesario en un sector bajo amenaza constante de contrabando técnico e infracciones aduaneras”, señaló en el comunicado.

Al respecto advirtió que “la importación desregulada de productos textiles a Argentina genera, en la mayoría de los casos, competencia desleal”. En primer lugar porque gran parte de esa mercadería proviene de Asia (más del 70% de las importaciones totales) y “es fabricada en países donde no se cumplen con mínimos estándares ambientales, las condiciones laborales son muy precarias y carecen de condiciones de seguridad e higiene”, indicó Pro Tejer.

En la misma línea, recordó que tanto la Argentina como toda Sudamérica, “es blanco de productos excedentes de temporadas pasadas del hemisferio Norte, por lo que muchas prendas se importan a precios rebajados y por debajo de los valores de mercado”.

A esto se le debe sumar que en las importaciones del rubro textil “es común encontrar maniobras irregulares, tales como la falsa declaración de mercadería bajo posiciones arancelarias que no corresponden, triangulación de origen o subdeclaración de valores de importación”. Hay que tener en cuenta que el nomenclador textil es de los más amplios, incluyendo 13 capítulos arancelarios.

“Frente a esta realidad, el diseño y puesta en marcha de normas avaladas por OMC tales como medidas antidumping, salvaguardas, valores de referencia y normas técnicas que preserven la salud y seguridad del consumidor es sumamente relevante para fomentar la competencia equitativa y leal”, enfatizó Pro Tejer.

Y por último remarcó que “estas medidas se deben complementar con un accionar eficaz y eficiente de la Dirección General de Aduanas, encargada de fiscalizar las condiciones de ingreso y salida de la mercadería y evitar el fraude fiscal y las maniobras elusivas”.

Esta es la verdad detrás del precio de las camperas en Argentina

Fuente: El Economista – «Es hora de desligarle a la industria nacional el tema del precio y analizar qué pasa en el segmento comercial donde actúa el coeficiente de multiplicador del precio de la ropa», dice ProTejer.

El fin de semana se viralizó un contenido en X que mostraba una campera importada en el supermercado a $60.000 anunciando el fin de la industria nacional y algunos usuarios incluso lo festejaron. 

Desde ProTejer aprovecharon el viral para salir a dar contexto. «Lamentablemente, desde hace muchísimos años el 98% de las camperas que se venden en Argentina son importadas. De vuelta, se confunde el precio de la ropa con la participación de la industria nacional cuando la distorsión de precio está relacionada con el eslabón comercial», dijeron. 

El 2023 fue récord de volumen importado de camperas y el primer bimestre del 2024 se encuentra alineado a esos volúmenes. Sólo 20 importadores representan más del 52% del volumen total importado de camperas de todo el país destacándose dos canales de comercialización: las marcas premium y los supermercados. 

Otro dato para tener en cuenta: analizando todos los primeros bimestres de año desde 2015 a 2024, se observa que en 2024 el precio en dólares por kilo importado es mucho más bajo que años anteriores. En enero-febrero 2024 el precio fue de US$ 19,69 el kilo mientras que en enero-febrero 2015 Argentina importaba camperas por US$ 31,64 el kilo. 

«Esto muestra que el mix importado es de menor calidad acorde con la degradación del mercado interno. Y es también explicado porque, si bien China se mantiene como el origen del 85% de las importaciones de camperas, han crecido Vietnam, Bangladesh y Cambodia, 3 países con condiciones productivas en tensión con respecto a los derechos laborales, al nivel de contaminación y al uso de químicos y productos nocivos para la salud de los consumidores», dijeron. 

Este es un claro ejemplo de la gran diferencia de precio de la ropa entre los distintos canales de comercialización como shoppings y supermercados y en un segmento donde la industria local no tiene participación ya que son productos importados, agregaron. Por ejemplo, dicen, una campera en un negocio en la calle Avellaneda vale $20.000, una campera similar en el supermercado como la que se viralizó vale $60.000 en o una campera similar de marca como Zara en un shopping triplicaría su precio como mínimo. 

«Es hora de desligarle a la industria nacional el tema del precio y analizar qué pasa en el segmento comercial donde actúa el coeficiente de multiplicador del precio de la ropa. Seguramente el peso del posicionamiento de la marca, el costo de alquiler en shopping, el costo financiero y el costo logístico expliquen, en buena medida, estas divergencias. Todos costos que no son industriales», sentencian.

Guillermo Fasano de la Cámara Textil de Mar del Plata Analiza los Primeros 100 Días del Gobierno de Milei

Fuente: LU9 Mar del Plata – Guillermo Fasano, presidente de la Cámara Textil de Mar del Plata, compartió su análisis sobre los primeros 100 días del gobierno del presidente Javier Milei desde la perspectiva de la industria textil.

En cuanto al nivel de actividad, Fasano destacó una caída significativa de la demanda, estimada en un 30%, lo cual refleja una tendencia similar a la experimentada en otros sectores. Además, señaló un aumento considerable de los costos durante los meses de noviembre, diciembre y enero, que se espera continúe durante marzo y abril debido a los incrementos en las tarifas de servicios.

Con respecto a las expectativas sobre los cambios estructurales necesarios para el sector textil, Fasano expresó que hasta el momento no se han satisfecho. En particular, mencionó que la apertura irrestricta de las importaciones ha resultado perjudicial, y que las demandas relacionadas con los cambios impositivos y la ley de contrato de trabajo aún no han sido abordadas.

En resumen, Fasano concluyó que en estos primeros 100 días del nuevo gobierno nacional, se ha observado una caída importante en la demanda y una falta de resolución de las expectativas del sector textil. La incertidumbre persiste sobre cómo los cambios que se implementen impactarán en la industria y cuál será la nueva estructura empresarial resultante de este ajuste.

Claudio Drescher: «no tengo ningún problema que acá se abra la competencia»

Fuente: Perfil – El presidente de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), Claudio Drescher, salió a cuestionar duramente las políticas del gobierno de Javier Milei por la destrucción de la industria, el desplome de la economía y la crisis social de sus medidas.

El presidente de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), Claudio Drescher, salió a cuestionar duramente los efectos de la política económica del gobierno de Javier Milei porque dejaron la industria «al borde del colapso», que profundizaron despidos. Además, advirtió que eso podría traducirse en más inseguridad. «Van a salir a robar».

En declaraciones a Radio Mitre, Drescher comenzó este jueves 21 de marzo su análisis: «Todos estos despidos que están sucediendo, cuando ya tenemos 50% de pobres, esa gente va a perder el trabajo, no va a tener ingresos. ¿Qué van a hacer? ¿Más planes sociales? No, no hay más planes sociales«.

Y, en esa línea, se preguntó que si hay despidos y no hay más planes sociales «¿Qué va a pasar con los hijos de 15 años de los trabajadores despedidos? ¿Qué van a ir a hacer? ¿Qué van a hacer los pibes de 15 años que su papá fue despedido de una fábrica de confección? ¿Qué van a hacer?».

Ante esas preguntas, el presidente de la firma Jazmín Chebar concluyó que el resultado sería catastrófico y no alcanzaría con más medidas represivas: «Afanar. ¿Cuántos tanques vas a comprar? ¿Cuántas pistolas especiales vas a comprar? ¿Cuántos patrulleros vas a comprar? Si no hay empleo, la Argentina no tiene futuro«, alertó.

Para ejemplificar, Drescher sostuvo que no conoce ningún país desarrollado sin industria mientras que dio los ejemplos de Alemania, Italia, Francia, Japón y Estados Unidos.

Si bien el empresario cuestionó el modelo anterior, consideró que las políticas de Milei traerían un conflicto social y estructural mucho más grande: «Que el sector tiene que mejorar, seguro. Que el Estado tiene que mejorar, ni hablar. Venimos de una época nefasta, pero lo que estamos aplicando como política va a traer un gravísimo problema social y estructural en la Argentina que yo creo que no lo están viviendo. No hablo de las empresas, no hablo de indumentaria. Mi preocupación es mucho más global».

«No se habla de desarrollo, no se habla de producción. No es un tema monetario la economía. Es mucho más global. Escucho de ahorrar y no de crecer. Vos tenés que hacer las dos cosas. Porque si no, si solo pensás en ajustar gastos, lo que te va a quedar es una distribución muy baja que va a afectar realmente a la salud de la población desde todos los puntos de vista. Ordenar la macro también es hacer crecer la economía«, argumentó.

Por otro lado, advirtió los efectos de la recesión sobre el entramado social y alertó por el impacto en la clase media. «El nivel de marginalidad que tiene Argentina es horroroso. Con esta política nos vamos a convertir en uno de los países latinoamericanos bananeros y a la clase media la van a destruir. No va a quedar nada de todo esto», consideró.

Al ser consultado por el precio local de la ropa, el titular de CIAI afirmó que en el país existen diferencias «tremendas» y mencionó que una remera puede costar $5.000 o $50.000 dependiendo la marca o la calidad del producto. Sin embargo, sostuvo que las importaciones no están cerradas y que su sector no tiene inconvenientes con la competencia. «No somos proteccionistas, de ninguna manera».

«El tema es que vos tenés un arancel de Mercosur que nos parece correcto frente al sureste asiático y tenés que tener un dólar de equilibrio. Ahora si el dólar pasa a $300 y después se va a $1.300 y ahora baja a $1.000. Con esos movimientos bruscos, inesperados, es muy difícil saber si la competitividad de la Argentina es correcta. Pero igual te digo la verdad, yo no tengo ningún problema que acá se abra la competencia. Me parece correcto», puntualizó Drescher.

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En otro orden, también criticó la flexibilización al ingreso de productos de la canasta básica desde el exterior que decidió el ministro de Economía Luis Caputo: «El tema son los instrumentos que nosotros tenemos. Lo que hicieron con los alimentos es grave. Había una lista que eran carísimos. ¿Qué hacen? Le baja los impuestos a los importadores. ¿Pero vos podés entender el absurdo? Si esos precios estaban por encima, que le bajen los impuestos al productor nacional. Creo que ahí, la verdad que los funcionarios no están entendiendo el tema que hoy tenemos una recesión profunda con una industria absolutamente al borde del colapso».

«Esto lo que a mí me preocupa, ya se lo digo no como empresario, se lo digo como un argentino que ama este país y cumple más de 70 años. Realmente tengo muchas ganas de que mis nietos vivan en un país que sea feliz. Y yo no lo veo feliz este país. No veo que estemos haciendo cosas para que seamos felices. No importa mi empresa, no importa la industria. Si no tiene que haber ropa argentina, que no la haya. Yo quiero que la gente esté bien. Quiero que mi país sea feliz, quiero que mis nietos vayan por la calle y no le afanen el celular. Quiero poder salir y saludar a los vecinos. Esa es la Argentina que amamos. Esa es la Argentina que tenemos que defender», concluyó Drescher.

El sector textil, en la cuerda floja por la inflación y la caída del consumo

Fuente: MDZ – Empresarios advierten que ya se registran recortes de horas extra, de turnos, y suspensiones. Una radiografía del rubro indumentaria y las razones detrás de los fuertes aumentos.

La inflación se disparó en el país hace un año, y la aceleración de precios se profundizó post asunción de Javier Milei. El poder adquisitivo de los argentinos cayó significativamente, y como efecto dominó, el consumo se desplomó. Los datos oficiales del Indec muestran que hay una recesión económica. El sector textil no es la excepción, y en diálogo con MDZ, empresarios detallaron que se encuentran en niveles muy bajos de su uso de capacidad instalada, y que, como consecuencia directa, se ven los primeros coletazos en el empleo.

«A enero 2024, el poder adquisitivo del salario de los trabajadores formales cayó a niveles similares de abril 2003. Aumentos en las tarifas, en el transporte y prepagas, entre otros, golpearon al consumo en general y a la indumentaria y calzado en particular», detalló Luciano Galfione, presidente de la Fundación Pro Tejer.

La actividad productiva de la cadena textil está en niveles muy bajos, con un uso de capacidad instalada del 36,7%.

La crisis del sector textil

Un rubro castigado. Hace 5 años, la capacidad instalada de la industria textil estaba por debajo del 50% como consecuencia de la apertura de importaciones y la caída del consumo. Cuando empezaron a recuperarse, llegó la pandemia y la actividad volvió a caer. Finalmente, a mediados del 2023, lograron repuntar hasta niveles del 77% en lo que a capacidad instalada respecta. Entonces, las crisis económica argentina volvió a pegar y desde el último trimestre del año pasado hasta el momento, se encuentran en retracción.

Galfione especificó que «la actividad productiva de la cadena textil está en niveles muy bajos, con un uso de capacidad instalada del 36,7% -último dato oficial, actualizado a enero- y estimamos que continuó cayendo en febrero». 

Utilización de la capacidad instalada textil en porcentaje / Fuente: Indec.

Mauro González, empresario textil y presidente Confederación Federal Pyme Argentina, dijo en diálogo con MDZ que «hoy por hoy, el escenario es muy negativo, muy complicado para las pymes» por la combinación de una serie de variables: la apertura de las importaciones, la caída de la actividad económica, el impacto inflacionario mes a mes, y «las políticas que se están aplicando, que generan inequidad, pobreza y desempleo».

Ambos referentes del sector coincidieron en que la crisis del sector textil es tal que ya ha habido suspensiones en grandes tejedurías, se están cerrando turnos porque se achicó la producción, e incluso ha habido despidos.

«Ya comenzaron a relevarse recortes de horas extra y de turnos, suspensiones y hasta despidos», sostuvo el presidente de Pro Tejer.

«Se empieza por las suspensiones, y luego, se sigue por el cierre de pequeñas y medianas empresas», enfatizó González. 

La apertura de importaciones, el cuco de los empresarios

El método del Gobierno para combatir la inflación es la apertura de importaciones. Primero, lo hicieron abriendo las puertas a indumentaria, calzado y marroquinería escolar por un periodo determinado por 30 días e incluyéndolos dentro del programa Cuota Simple. La semana pasada,  anunciaron las importaciones de medicamentos y alimentos de la canasta básica. La estrategia es ampliar la oferta y que los precios bajen impulsados por la libre competencia.

El costo industrial de una prenda de vestir representa un 8,5% del precio final.

González hizo énfasis en este punto y advirtió que van camino a que se aplique en todos los rubros. Situación que no solo los pondría en desventaja, sino que profundizaría la crisis de la producción nacional, incluso empujando al cierre: «No es que estamos en contra de las importaciones, lo que estamos en contra es de que ingresen productos terminados para competir. Por cada producto importado que entra de otros países, es un puesto de trabajo menos. Entonces ese es el gran tema».

«Esta medida (en referencia a la habilitación de la importación textil), no solo fomenta la importación, sino que, además, destina fondos públicos para financiar producción en otros países», indicó Luciano Galfione. Y añadió: «El contexto actual genera que el resultado sea aún más perjudicial, dado que la industria nacional atraviesa una fuerte crisis por falta de ventas. Por ende, resulta fundamental que las medidas de fomento a la demanda busquen orientar el consumo hacia bienes fabricados en el país, con trabajo y valor agregado argentino, no destinar recursos para potenciar industrias de otros países».

¿Por qué es tan cara la ropa? 

En los últimos meses, los aumentos de la ropa estuvieron por debajo de los precios promedio de la economía. En febrero 2024, la inflación interanual para el sector indumentaria fue del 204,2%, es decir, 72 puntos porcentuales por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC) general. 

En este sentido, cabe destacar que si bien las subas corren detrás de la inflación, se trata de fuertes incrementos que ponen en jaque al sector. Ante este escenario, hay que diferenciar entre la ropa que se compra en el shopping de la que se compra en comercios de segunda línea. 

La inflación golpeó al consumo de indumentaria y calzado.

Al ser consultados por los factores que inciden en el alto el precio de la ropa en Argentina, Galfione explicó que una de las principales razones es la estructura de costos: «El valor industrial de una prenda de vestir representa apenas un 8,5% del precio final. Es decir, que claramente el problema no tiene que ver con qué pasa de las puertas de las fábricas hacia adentro. Cuando vemos cuáles son los otros costos, no podemos evitar de decir la enorme incidencia que tienen la suma de los impuestos en el precio de la prenda (50%), al que debemos sumar el alquiler de locales y shoppings (13%), gastos bancarios (12%) y costos logísticos (9%), entre otros, que explican un 84% del precio de venta». 

Desde Fundación Pro Tejer enfatizaron en la alta incidencia de los impuestos en el precio en vidriera de una prenda de marca, ya que en la cadena de producción y comercialización textil se suman una serie de costos no-industriales como el alquiler en shopping, las plataformas online, los costos financieros, costos de marketing y publicidad generan un gran efecto multiplicador entre la puerta de fábrica y la “vidriera”. 

Ahorro ante la diversidad de precios

Al comparar productos de marca con otros de producción masiva, se encuentran prendas de similares características, que tienen una amplitud de precios muy elevada entre sí.

El argentino de a pie busca formas de ahorro y crece la tendencia de comprar en la zona la calle Avellaneda en Flores y similares, de los outlets y de showrooms y emprendimientos cuyo fuerte es la venta online. Estos nuevos segmentos se han consolidado como una alternativa para la clase media. Con menores costos de alquiler, financieros, de publicidad y marketing, los precios que resultan más atractivos que los que encuentran en los principales shoppings.  

La Cámara Textil de Mar del Plata realizó propuestas al Gobierno Nacional

Fuente: Noticias Mar del Plata – El presidente de la Cámara Textil de Mar del Plata, Guillermo Fasano, participó como integrante de la Mesa Federal del Movimiento Nacional Pyme (MONAPY) de una reunión con el secretario nacional del conocimiento, emprendedores y PYMES, Marcos Ayerra, en un evento que se realizó en San Rafael, provincia de Mendoza.

Los empresarios plantearon la necesidad de atender de forma simultánea los aspectos coyunturales de la realidad ante el ajuste del gasto público y su consecuente caída de la actividad, y la implementación de la Ley Integral Pyme, que implica pronosticar un futuro de crecimiento y aumento del empleo.

Las conclusiones de la reunión de 90 minutos fueron: «en la coyuntura contamos con la suspensión de embargos y baja tasas de AFIP (se pidió mantener hasta el 31/12); la implementacion inmediata de una nueva herramienta de los Bancos; el LUFE, para otorgar préstamos garantizados por FOGAR, sin el requisito de libre deuda impositiva y aprovechando las tasas negativas del mercado y además, el estudio de bajas de contribuciones en aquellos sectores más afectados por el ajuste», detalló Fasano.

Y añadió que «en el planteo de la Ley Pyme, la Secretaría está trabajando sobre la base del proyecto presentado por el MONAPY, al que se le incorporarán otros proyectos e iniciativas que tiene la Secretaría».

El objetivo es consensuar un proyecto de Ley para presentar este año. Al respecto, Fasano pidió que se copie, en esta ley, el mismo proyecto de incentivos fiscales del DNU, conocido como RIGI (Régimen Impositivo para Grandes Inversores), transformando el régimen en el RIP (Régimen Impositivo Pyme).

Incertidumbre en la industria textil, caída de ventas y temor por las fuentes laborales

Fuente: El Retrato de Hoy – Guillermo Fasano, titular de la CámaraTextil de Mar del Plata, en diálogo con “el Retrato…”  al referirse a la situación actual del sector textil marplatense, subrayó: “hay tantas opiniones como empresas”. No obstante, añadió: “estamos en un momento de mucha indefinición, de confusión. Un momento de no saber qué es lo que va a suceder. Sabemos que hay una metodología de cambio, no sabemos si se va a poder implementar. Se está debatiendo. Estamos con la incertidumbre de lo que va a cambiar o no. Además, el ajuste es muy profundo, es muy brutal”.

En esta línea, manifestó: “esperemos que la política esté a la altura de las circunstancias y defina rápidamente cuál es el modelo y los cambios estructurales que se tienen que hacer para que, a partir de ahí, nosotros, cada uno de los empresarios, emprendedores y especialmente las PyMEs, decidamos qué es lo que vamos a hacer”.

Caída de ventas y fuentes de trabajo afectadas

Además, sobre la temporada estival, el presidente de la Cámara Textil, aseveró: “el mostrador del verano es solo una parte menor de la producción. Fabricamos los sweaters para todas las grandes marcas de todo el país. Abastecemos a todo el país”.

Sin embargo, señaló que ahora se trabaja mucho con las tiendas online. “Antes los turistas venían a Mar del Plata y se desesperaban por un pulóver. Hoy lo tienen en el teléfono. Esa venta que se hacía antes, por esas razones no se hace. Asimismo, hay indudablemente una caída del poder adquisitivo de la gente y un temor muy grande. Es muy importante la caída”, sostuvo.

En relación a esta caída de ventas, Fasano indicó: “he escuchado las cifras de la UCIP (Unión del Comercio, la Industria y la Producción) de Mar del Plata, hablan de un 20%. Nosotros no tenemos estadísticas de la Cámara, pero en base al conocimiento de los socios que son referentes, estamos en ese porcentaje”. De esta manera, agregó que “es un porcentaje preocupante, pero para nosotros no es todo. Lo que más vendemos es al por mayor. La temporada de invierno, ya la fabricamos y la entregamos. La preocupación es lo del verano. Porque hacemos menos pulóveres para el verano. Ahora a partir de febrero y marzo, empiezan a pedir las muestras y presupuestos y tenemos mucho temor que esos pedidos no existan”.

Por consiguiente, consultado si se podrían ver afectadas las fuentes de trabajo, Fasano remarcó: “sí, obviamente. Es un problema transversal”. Así, argumentó que “se debe definir qué se va a hacer con las PyMEs, las pequeñas y medianas empresas, que son las que generan el 42% del país. En nuestro caso, como Cámara y rubro, todas son PyMEs”.

En consecuencia, el presidente de la Cámara Textil, señaló “cuatro factores que son importantes en todo esto: la industria al juicio laboral, el financiamiento, la alta carga impositiva y el cúmulo de regulaciones y trabas burocráticas que tienen las pequeñas empresas. Las leyes están pensadas para las grandes empresas y hay que simplificar”. Así también, añadió que “hay un modelo de país, pero deben comprender, de una vez por todas, que la salida son las PyMEs, pero deben mejorar esas condiciones de manera simultánea para poner el país en desarrollo”.

Situación sobre las importaciones

Si bien parte de la materia prima del sector textil es de origen nacional, un porcentaje de los insumos son importados. Sobre esta cuestión, Fasano sostuvo que “ha ocurrido un proceso que nosotros no previmos y que no se vio. Pedimos la licencia no automática del pulóver en el 2004 y la conseguimos. La 9° licencia no automática del país, personalmente participé de ese pedido. Eso es una buena idea porque hay un producto terminado que si no se importa se supone que se va a fabricar acá. Pero lo que terminó ocurriendo es que de nueve licencias automáticas terminó habiendo 12.000. Eso hizo que se bloqueara la entrada, no solo del pulóver terminado, sino que se empezaron a bloquear los insumos que necesitamos para trabajar. Eso fue una trampa”.

Siguiendo esa idea, agregó que “hoy, como somos argentinos que vamos de un extremo al otro, quieren abrir todo. Me parece que hay que definir cuestiones estratégicas generales. Por ejemplo, si se va a defender el producto terminado, si se va a defender la pequeña empresa o algún determinado sector. Y en base a eso se decidirá”. Sin embargo, concluyó que “hay incertidumbre, por lo que habrá que esperar ver qué es lo que pasa”.