Fuente: BAE ~ La virtualidad se transformó en nuestra nueva realidad con el aislamiento. En ese escenario, el comercio electrónico ganó presencia como gran vidriera de productos. Para estimular las ventas y acercar la experiencia online a las compras que solíamos hacer cuando se podía revolver, elegir, tocar y probarse, muchas marcas locales están recurriendo a la tecnología.
Así lo destacan desde Mc Luhan Consulting, empresa argentina especialista en relacionamiento con clientes basados en tecnología que desarrolló una batería de soluciones para integrar la compra online con la que se hace en las tiendas físicas. «Tenemos muchas consultas de empresas, tanto para ecommerce como para la vuelta a la tienda física, ya que mucha gente no quiere tocar los productos ni probárselos. Un caso muy típico es el de maquillaje«, indicó Andrea Mandelbaum, CEO de la compañía, que menciona también a las ópticas con la prueba de anteojos y a la elección del color de la tintura de pelo, que tuvo que ser casera con las peluquerías cerradas.
En la compra online, desde la firma desarrollan recorridos virtuales por el local real o con un modelo de render. El cliente ingresa tanto por una app o web y puede recorrer toda la tienda, ver descuentos y clickear en algún producto que le llame la atención. Ahí se despliega la posibilidad de ver el producto (prendas, calzado, anteojos, maquillaje, sillones, etc.) en 360- con las características del mismo, por ejemplo, en el caso de una prenda, con qué tela está hecha, en qué talles viene, colores, etc., y luego, por medio de filtros de try-on se la puede probar, tanto en sus manos, como en la cara, cabello y cuerpo. Para el caso de objetos como muebles, grifería, adornos, electrodomésticos, alfombras, la experiencia se da dentro de la casa y pueden ubicar el sillón en el living, cambiar de colores, rotarlo. «Es una tendencia mundial que vino para quedarse. Así lo refleja esta encuesta de USA Retail: el 72% de los clientes compraron artículos que no planeaban debido a la Realidad Aumentada«, agrega la ejecutiva.
Soluciones similares, como recorrido 360 grados por la tienda, están siendo utilizadas por marcas de indumentaria como India Style, Portsaid y Desiderata. Las dos últimas sumaron además la opción de personal shopper: una vendedora le ve mostrando a la clienta las prendas por videollamada y hasta pueden probárselas si hace falta. «Nos quisimos adaptar a las necesidades de nuestros clientes para brindarles nuevas formas de venta, de vínculo y de contacto a través de la tecnología», explican desde Desiderata e indican que esta herramienta genera también más oportunidades de venta porque las vendedoras pueden proponer productos.
«A partir de la pandemia, mucha gente que no había usado el ecommerce para la compra de determinados productos como indumentaria, sobre todo a partir de los 40 años, se animó a hacerlo y se sintió cómoda con ello», dijo Mandelbaum, quien de todas formas habla de una convivencia futura con lo presencial. «Lo importante es que el retail se prepare para esta integración entre el físico y el virtual», dijo.