En este contexto y según pudo averiguar Ámbito Financiero, John Foos ya realizó una oferta concreta para quedarse con la ex planta Calzar, que luego pasó a manos de Alpargatas, ubicada en el parque industrial de Santa Rosa La Pampa.
Fuente del sector aseguraron que las negociaciones están muy avanzadas pero quizás el punto de quiebre es que la empresa argentina pretende pagar un “valor muy por debajo del de mercado”. De todas formas la operación estaría pronta a concretarse.
Como señal positiva se sabe que John Foos ya entrevistó y tomó pruebas de aptitud a alrededor de 90 extrabajadores de la planta que fue cerrada por Alpargatas en septiembre del año pasado.
Mientras tanto la empresa nacional ya cuenta con una planta de producción ubicada en la localidad de Beccar, provincia de Buenos Aires, y es uno de los principales operadores en el segmento de calzado urbano e informal.
Por supuesto que John Foos no es ajena a la crisis que afecta al sector y a la economía en general, incluso recientemente desde la empresa emitieron un comunicado concreto al respecto: “John Foos, en representación de las empresas del sector, se solidariza con los 39.000 despidos producto del cierre de fábricas de calzado en todo el país, que afecta a toda la cadena de producción. Asimismo, convoca a las cámaras y agrupaciones empresarias a sumarse a este llamado para proteger los derechos de la industria”.
Apertura indiscriminada
“Desde hace tiempo venimos denunciando que el sector de la industria del calzado padece la apertura indiscriminada de importaciones de productos que, muchas veces son subfacturados, favoreciendo la evasión fiscal y el ingreso ilegítimo por las fronteras” expresó Ricardo Fernández Mora, gerente comercial de la firma.
Este planteo forma parte de una solicitud que John Foos hizo a las autoridades gubernamentales pidiendo “detener la medida que elimina los valores criterio del calzado, que dictaría en estos días la Dirección General de Aduanas” y que operan como una protección para la industria nacional frente a la competencia importada a precios de dumping.
La empresa que se inició en 1980 en el mercado argentino, y actualmente emplea en forma directa a alrededor de 500 personas y cuenta con una capacidad de producción de 80.000 pares de calzado por mes. A comienzos de 2017 había concretado una inversión de $5 millones para sustituir importaciones de algunos de los componentes necesarios para la fabricación de las zapatillas. En aquel momento el sector tampoco pasaba su mejor momento y desde la empresa buscaban justamente optimizar procesos y mejorar costos para salir a flote.
Hoy en medio de esta profunda crisis busca una oportunidad de negocios y hasta de ampliarse con la mira puesta en La Pampa.
Hola soy diseñadora de indumentaria me gustaría enviarles mi CV para alguna oportunidad o puesto referido a esta sector. Les dejo mi correo.
saluda atte
Manuela
Hola soy Diseñadora de Indumentaria y también trabaje en el área de Visual de varias marcas.
Quisiera poder enviar mi CV.
Gracias